
La Universidad Mariana fortalece su compromiso con la innovación, la transferencia tecnológica y la formación integral de sus estudiantes a través de experiencias académicas que conectan el conocimiento local con la investigación global.
En esta ocasión, la Facultad de Ingeniería, junto con el Programa de Ingeniería Mecatrónica, lideró una jornada de intercambio académico y tecnológico con la participación del Magíster Nicolás Ramírez, ingeniero mecatrónico nariñense, candidato a doctor, radicado en Dinamarca y fundador de la startup Fablab Mima, con sede en la República Checa.
La visita, coordinada por la Unidad Académica de Extensión, dirigida por la magíster Carolina Benavides y Conecte, bajo la orientación del magíster Edgar Parra y el ingeniero Glen Guerrero, permitió no solo el fortalecimiento de vínculos académicos internacionales, sino también la reactivación de un equipo del laboratorio de Alvernia, como es una impresora 3D.
El ingeniero Ramírez lideró un proceso de actualización tecnológica y modernización integral del sistema, convirtiendo la máquina en una plataforma modular de código abierto. El proyecto incluyó la renovación de la tarjeta de control y la incorporación de un sistema de impresión con materiales sostenibles como cerámica, arcilla y cemento, abriendo nuevas posibilidades para la investigación aplicada y la experimentación con recursos de origen local.
Durante la jornada, se desarrolló una capacitación dirigida a profesores y estudiantes del Programa de Ingeniería Mecatrónica sobre configuración, calibración y potencial de la impresora en procesos de innovación y desarrollo tecnológico.






“Buscamos transformar equipos en herramientas de investigación abiertas, que inspiren a los estudiantes a crear, experimentar y aplicar sus conocimientos en soluciones reales”, explicó el ingeniero Ramírez.
En un segundo momento, el investigador compartió su experiencia en África con el proyecto “Somehow Nice Plastic”, una iniciativa de reciclaje e innovación social implementada en Ghana, que transforma botellas plásticas en filamentos para impresión 3D. A través de demostraciones prácticas, los participantes conocieron alternativas sostenibles de fabricación digital y reflexionaron sobre el potencial del diseño circular y la economía verde como motores del desarrollo tecnológico.
El estudiante Alejandro Díaz, de noveno semestre, destacó la relevancia pedagógica de la experiencia “Nos permitió aprender sobre controladores abiertos y plataformas web de impresión, además de explorar materiales como la arcilla o el cemento, ampliando nuestra visión sobre lo que podemos hacer desde la ingeniería”.
Por su parte, Ramírez resaltó el talento y la proyección de la comunidad académica: “Esta experiencia demuestra el potencial de la región para innovar en materiales sostenibles y tecnologías de código abierto que fortalecen la apropiación social del conocimiento”.
Estas experiencias de cooperación internacional consolidan el liderazgo de la Universidad Mariana en el fomento de una ingeniería al servicio de la sociedad, donde la tecnología, la creatividad y la sostenibilidad convergen para impulsar soluciones con impacto social y ambiental.
Así, el Programa de Ingeniería Mecatrónica reafirma su propósito de formar profesionales capaces de transformar los desafíos del entorno en oportunidades de desarrollo, integrando ciencia, ética y compromiso con el territorio.
